En su vigésima edición, la Feria del Libro de Bucaramanga, Ulibro, ofrecerá a sus visitantes a través de la franja de cine un recorrido por lugares icónicos, personajes y temáticas que han hecho parte de la historia de Bucaramanga. Además de su valor histórico, algunas de estas piezas se destacan por ser inéditas.
“Particularmente el acento en el componente de cine regional está dado por eslogan Ciudad Memoria, se han privilegiado cortos y contenidos que han hecho autores de la ciudad sobre lo que es Bucaramanga. Se destaca Bucaramanga milímetros, considerado la memoria audiovisual de los 60’s y 70’s de la ciudad; Tren transoceánico, basado en el músico Álvaro Serrano; Buscando el Paulón, realizado por un colectivo de artistas de la ciudad y niños que trata sobre una escuela al norte de la ciudad”, explicó Carlos Ernesto Acosta Posada, director del programa de Artes Audiovisuales de la UNAB.
Los visitantes también podrán ver un capítulo de la serie Silvia Galvis, huellas y letras, y escuchar al equipo de producción hablar sobre la realización de este trabajo que trae a la memoria un personaje fundamental dentro del periodismo de investigación en Colombia.
Conoce acá toda la programación de la Franja de Cine de Ulibro 2022
El día jueves 1 de septiembre la franja estará dedicada a Señal Memoria, un apartado de RTVC que tiene documentales, algunos inéditos, sobre distintas ciudades del país y Ulibro será el escenario para ver varias de estas obras sobre la colección de la capital santandereana.
El cine local será también la oportunidad para que estudiantes y talento joven presenten sus trabajos. “Es para todo el mundo, muchos niños y jóvenes podrían aprender sobre su ciudad asistiendo a estas funciones. Es una muy buena forma de contarles la historia sobre una calle, un músico o el barrio en el que crecieron”, concluyó Acosta Posada.
La cuota internacional incluye piezas audiovisuales de países como Italia, Brasil, Austria, China y Armenia. Como novedad, estos largometrajes se van a proyectar a medio día, de tal manera que las personas tengan la opción de almorzar en Ulibro y disfrutar de estas proyecciones mientras esperan que inicie la agenda de charlas de las tardes.